Con motivo de su reciente nombramiento como director de ‘Proa a la mar’, entrevistamos a Juan Ignacio Pinedo del Campo.
Juan Ignacio Pinedo es Doctor en Medicina y Cirugía, Master en Economía y Dirección de Empresas y en Dirección de Operaciones. Especialista en Medicina Nuclear y en Mediación y Arbitraje Sanitario.
Ha sido Director General de diversas instituciones hospitalarias y sanitarias, siendo actualmente Responsable del área de oncología médica del Instituto Madrileño de Oncología. De manera paralela ha desarrollado su labor docente en varias universidades nacionales.
Es Capitán de Yate, reciente Director de ‘Proa a la Mar’ y colaborador de la publicación en la sección de Historia Naval
¿Qué lleva a un Doctor en medicina a interesarse por el mundo de la Mar?
Mi Bilbao natal, el cine, la Escuela Naval Militar de Marín, ser teniente médico de la Armada, ser capitán de yate, mis salidas a navegar y ahora, mi dedicación a la RLNE.
Siempre me ha parecido la Mar un espacio de libertad, expansión, autoconocimiento, que te acerca a la naturaleza, donde uno depende de sí mismo, aprende humildad, y es consciente de la fragilidad del ser humano.
La Mar da ejemplos de vida como lo hacen pocos espacios, y en el micromundo que es una embarcación, las relaciones humanas tienen otra vertiente más intensa e interesante. En la Mar uno respeta a la naturaleza, la comprende, aprende de ella, y hay un espacio de acercamiento a los demás, de lucha por la vida, de crecimiento personal, y de trabajo y esfuerzo constante.
Todos éstos son principios compartidos; la Mar ofrece claves propias de la Medicina.
¿Por qué crees que los españoles apenas concedemos importancia a nuestra realidad Marítima?
Creo que hay en los españoles un doble sentimiento perverso que nos ha condicionado toda la historia, la envidia y la autodestrucción, que lamentablemente ésta tan actualizada. Aderezado con otros dos sentimientos, complejo de inferioridad, y valorar más al extraño que al vecino.
España ha ignorado sus logros en la Mar como también lo ha hecho en otras disciplinas y campos. Hemos magnificado las derrotas, que tampoco fueron tantas y tan grandes, y hemos olvidado o minusvalorado los logros. Nuestro principal enemigo siempre estuvo dentro, y los que de verdad destruyeron varias veces nuestra flota nacieron en nuestras fronteras, con nombres españoles.
¿Algún nuevo libro en proyecto?
Sí, estoy con dos. Por un lado, tras editar dos libros de la trilogía de la Marina, “Almirantes, Reyes y Batallas. Una historia de la Marina de Castilla”, y el que está saliendo justo ahora, “Mitos, derrotismo, leyendas negras y héroes olvidados. Una injusta historia oficial”, estoy ahora trabajando en el que cierra la trilogía, “Perfiles de liderazgo y heroísmo en la Mar”, donde se repasan las vidas, hechos, circunstancias, formas de pensar y de dirigir, comportamientos, estilos, etc., de varios marinos que, en mi opinión, destacaron por su capacidad de liderazgo, por su heroísmo y por ser fuente de inspiración.
Por otro lado, está a punto de salir “La conquista de los Polos. Los Hombres del Norte”, la historia de la conquista de los Pasos del Noreste y del Noroeste, y del Polo Norte. Un repaso de aquellos hechos protagonizados por unos hombres muy normales a quienes las circunstancias convirtieron en extraordinarios. Abundaremos en sus historias, las circunstancias que les tocó vivir y los hechos que protagonizaron, desde una perspectiva crítica, desmitificadora, ajustada a una verdad adulterada demasiadas veces, para que sea el lector quien pueda hacerse él mismo un juicio de lo que fue aquello. Por ello hay un capítulo final, “Preverdades y Postverdades”.
¿Cómo enfocas el reto de dirigir una revista ya consolidada con tantos años de vida como Proa a la Mar?
Con enorme ilusión, gran sentido de la responsabilidad, y mucho agradecimiento a la Comisión Ejecutiva de la RLNE por darme su confianza. El enfoque es doble:
Fortalecer el posicionamiento de la Revista como instrumento de comunicación eficaz, y lograr que aquellos que colaboran con la Revista estén motivados para convertirla en un referente en el mundo de la Mar, y trasladar ese amor y respeto que aquí sentimos por la Mar, a otras personas ajenas a la RLNE, organismos, instituciones, etc.
Queremos además tratar diferentes aspectos de la Mar, técnicos, tecnológicos, científicos, prácticos, históricos, económicos, legales, y un largo etcétera, teniendo en consideración el hecho de que la RLNE se compone de la suma de varias marinas, la de Guerra, la Mercante, la de Pesca, la Deportiva, la Científica, etc. Todas ellas tienen su cabida y su espacio en la Revista, por lo que se le da un abordaje integral y una presencia y protagonismo compartidos. Queremos dotar a la Revista de un elevado nivel, exigencia, calidad y rigor, y lograr que se convierta en un reconocido, valorable y necesario referente en el mundo de la Mar.
¿Qué papel crees que juega la RLNE dentro del entramado marítimo español?
La RLNE es una institución llamada a jugar un singular papel en este sector, por historia, vocación, responsabilidad y necesidad.
La RLNE debe contribuir a recuperar la historia, el posicionamiento y el orgullo de España en la Mar; defender, cuidar y potenciar los intereses marítimos españoles, de todas las Marinas; dar a conocer de manera muy divulgativa aquello que acontece y tiene que ver con la Mar, en distintos foros y sectores de actividad, económicos, sociales y demográficos; defendiendo la necesidad de un Ministerio de la Mar, que un país como el nuestro debe indudable y necesariamente tener; y abordar diferentes actividades dirigidas a proteger, desarrollar y enriquecer, el acervo marítimo español, elaborando estudios, análisis y documentos de opinión, estudios técnicos, conferencias, mesas redondas, estudios de casos, publicaciones, libros, colaboraciones institucionales, estudios y trabajos científicos, exposiciones, formando parte e incluso liderando grupos de trabajo, y un largo etcétera.
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